Cómo Apple casi acaba con la prometedora startup Density pero acabó contribuyendo a crear un mejor producto

💿 ¡Oferta especial de Pascua! ¡Windows 11 por solo 13,45€ y Office 2021 Pro por 25,25€! [ Saber más ]

Density es una spin-off de una compañía de consultoría llamada Rounded. El equipo fundador de Density (en la imagen) tuvo la idea de desarrollar un sistema para contar las personas que había en una habitación utilizando un router WiFi.

Cada vez que tu teléfono busca redes WiFi a las que conectarse, el router registra un identificador único llamado dirección MAC, incluso aunque el teléfono no llegue a conectarse a la red WiFi. Esta dirección MAC puede utilizarse para averiguar cuáles son las horas de mayor ocupación de un establecimiento, o para estimar cuántas personas hay en una sala en un momento dado.

El problema es que algunas compañías decidieron invadir la privacidad de los usuarios haciendo seguimiento de los clientes incluso cuando salían de una tienda, viendo dónde aparecía de nuevo esa misma dirección MAC. Si un número suficiente de establecimientos compartían los datos de direcciones MAC, podrían determinar los hábitos de los consumidores con gran precisión e incluso crear ofertas basadas en estos patrones.

Este sistema es algo parecido a una cookie en el Mundo Real, donde los usuarios van dejando rastro de todos los sitios que visitan. Esto suponía un grave problema de seguridad, así que Apple decidió combatir esta práctica haciendo que el iPhone genere direcciones MAC aleatorias durante el proceso de búsqueda de redes WiFi.

De esta forma la dirección MAC será distinta cada vez que visitas una tienda visita, y no hay forma de que pueden seguirte. Este movimiento fue un punto a favor de la privacidad de los usuarios, pero también acabó siendo un gran problema para Density porque desbarataba sus cuentas.

Si cada teléfono trata de conectarse a la misma red WiFi docenas de veces con direcciones MAC diferentes cada vez, no habría forma de saber realmente quién estaba en la habitación.

[otw_shortcode_quote border_style=»bordered»]Apple casi acaba con nosotros.
Andrew Farah, CEO de Density[/otw_shortcode_quote]

Sin embargo, gracias al cambio de Apple, Density acabó desarrollando un producto más robusto y más útil. En lugar de utilizar solamente routers WiFi para estimar el número de personas que hay en una habitación, Density coloca un aparato en el marco de la puerta y utiliza un par de sensores de distancia por infrarrojos para contar cada persona que entra y sale.

Sensor de Density

Sensor de Density

Además, dado que solamente está detectando movimiento, no sabe quién está entrando y saliendo por estas puertas, aliviando los problemas de privacidad.

Existen otras formas de contar personas según entran en una habitación, por supuesto, pero pocos son tan simples como este. Utilizar los iBeacon del iPhone requiere que los clientes tengan una aplicación instalada y Bluetooth activado.

La tecnología de contar personas ya está siendo aplicada en ciertos mercados. ¿Quién no ha ido alguna vez a un Starbucks y no ha encontrado sitio porque las mesas están ocupadas por gente con ordenadores y apuntes?

La startup Workfrom tiene un portal web que puntúa cafeterías, bares y otros lugares con WiFi gratuito y además proporciona información en tiempo real de cuántas mesas libres hay en este momento. De esta forma puedes saber si hay espacio para ti antes de caminar veinte minutos hasta el lugar con tu ordenador portátil para encontrarte que no tienes mesa.

Este portal se ha asociado con Density para instalar sus dispositivos en los marcos de la puerta y enviar el conteo de personas en tiempo real su base de datos. Gracias a esta sencilla idea, los establecimientos pueden atraer a más clientes en periodos de poca ocupación.

💿 ¡Oferta especial de Pascua! ¡Windows 11 por solo 13,45€ y Office 2021 Pro por 25,25€! [ Saber más ]

¿Cuál es tu reacción?
Sorprendido
0%
Feliz
0%
Indiferente
0%
Triste
0%
Enfadado
0%
Aburrido
0%
Incrédulo
0%
¡Buen trabajo!
0%
Sobre el Autor
Luis A.
Luis es el creador y editor jefe de Teknófilo. Se aficionó a la tecnología con un Commodore 64 e hizo sus pinitos programando gracias a los míticos libros de 🛒 'BASIC para niños' con 11 años. Con el paso de los años, la afición a los ordenadores se ha extendido a cualquier cacharrito que tenga una pantalla y CPU.
Comentarios
Deja un comentario

Deja un comentario