Ser conductor de coches es un trabajo pagado como otro cualquiera, pero Google parece dispuesto a cambiar este concepto. La compañía ha publicado una oferta de trabajo para contratar a gente que se siente en uno de sus coches autónomos y – bueno, cómo decirlo sin que suene raro – no los conduzca a menos que sea necesario.
La oferta de trabajo se llama «especialista de seguridad de vehículos» y tiene un sueldo de 20 dólares por hora por trabajar junto con otro especialista dentro de uno de estos coches.
El trabajo se desarrolla en un barrio de Phoenix y se requiere un grado universitario, un historial libre de antecedes criminales, y ser capaz de teclear al menos 40 palabras por minuto.
Según Digital Trends, un especialista se sentará detrás del volante del coche para tomar control si es necesario – lo cual no sería extraño ya que hace poco un coche de Google se ha chocado contra un autobús – mientras que el otro especialista enviará informes desde un portátil de cómo está yendo la prueba.
El trabajo es para cinco días a la semana entre seis y ocho horas, y el contrato es para uno o dos años.