Samsung ha hecho un comunicado oficial en su blog corporativo en el que reitera su compromiso con la calidad de sus productos, y desvela los resultados de la investigación que ha llevado a cabo con motivo del incidente de las explosiones.
La compañía ha detectado un problema relacionado con las baterías. Hasta la fecha, 1 de septiembre, Samsung reconoce que ha habido 35 casos en todo el Mundo y está llevando a cabo una inspección minuciosa con sus proveedores para identificar las baterías afectadas.
Sin embargo, la compañía ha explicado que, por precaución ante la seguridad de sus clientes, ha decidido interrumpir las ventas del Galaxy Note7.
Aquellos clientes que ya tienen sus dispositivos Galaxy Note 7, podrán reemplazarlo por uno nuevo en las próximas semanas aunque por el momento no tenemos detalles sobre dónde se realizará este cambio.
Estamos a la espera de tener noticias de Samsung España sobre cómo se va a llevar a cabo este proceso.