Margrethe Vestager, comisionada de la competencia de la Unión Europea, ha anunciado que la organización está examinando los acuerdos de Google con los fabricantes de Android y operadores de telecomunicaciones.
El objetivo de esta investigación es dilucidar si la insistencia de la compañía en pre-cargar Chrome, Gmail, Drive, Hangouts y el resto de las apps de Google podría estar evitando que las aplicaciones de la competencia lleguen a los clientes.
El año pasado, por estas mismas fechas, la Unión Europea acusó a Google de abusar de su posición dominante en el mercado de las búsquedas favoreciendo sus servicios de comparación de productos en los resultados de búsqueda.
Las organizaciones anti-monopolio de Europa llevan ya tiempo acusando a grandes empresas tecnológicas como Google y Microsoft de abuar de sus posiciones dominantes.
La investigación determinará si la Comisión Europea acusará a Google de un comportamiento que favorezca la anti-competencia. En ese caso, la autoridad podría imponer a Google una multa de hasta un 10% de las ventas anuales de Google. El año pasado la compañía generó 74.500 millones de dólares en ingresos, lo que podría significar una multa de 7.450 millones de dólares, es decir, unos 6.600 millones de euros. | Fuente: Reuters