El Samsung Galaxy S20 fue anunciado en febrero en un momento en el que la pandemia del coronavirus todavía no se había expandido a todo el mundo. Pero cuando las ventas del dispositivo han comenzado oficialmente, el COVID-19 ya tenía a la gente confinada en un mayor número de países.
Por esta razón, no nos sorprende que los nuevos buques insignia de Samsung no se estén vendiendo como se esperaba.
Según un nuevo informe procedente de Corea del Sur, la empresa celebró una teleconferencia informal con algunos analistas en la que dejó patente el hecho de que la serie Galaxy S20 se está vendiendo un 40 por ciento menos de lo que se vendía la familia S10 hace un año.
Además del Galaxy S20, es probable que los demás modelos de teléfonos, incluidos los dispositivos de gama media y baja, también experimenten un descenso en las ventas en todo el mundo.
Hay poco que Samsung pueda hacer para ayudar a impulsar las ventas de la serie Galaxy S20. Países de todo el mundo han establecido medidas de confinamiento debido a la pandemia de COVID-19 y se espera que los efectos de este cierre duren semanas. Con la desaceleración de la economía y el confinamiento en curso, los compradores van a ser cautelosos a la hora de gastar más de 1.000 euros en un smartphone.
Por supuesto, los demás aparatos electrónicos que fabrica Samsung también podrían registrar ventas decrecientes en todo el mundo, por lo que sin duda será interesante echar un vistazo al informe de resultados financieros de Samsung cuando la empresa lo comparta al final del trimestre.
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Eso sumado a los problemas de rendimiento del Exynos y sobrecalentamiento respecto al modelo Snapdragon, tienen al consumidor algo cabreado. Eso y la menor cobertura en llamadas respecto al resto de móviles...