Tras una serie de grandes anuncios la semana pasada, el nuevo propietario, Elon Musk, ha declarado que cualquier cuenta que participe en la suplantación de identidad será suspendida, a menos que se declare abiertamente como «parodia» en la plataforma.
Esto se produce después de que Musk anunciara que el codiciado tick azul, que diferencia las cuentas originales de personas famosas de las de sus impostores, estará ahora disponible para cualquiera que pague 7,99 dólares al mes por Twitter Blue, el servicio premium de la plataforma.
Elon ha confirmado que la plataforma no perdonará a ningún usuario que intente hacerse pasar por otro. La única salida para este tipo de cuentas será una divulgación adecuada en la que se mencione que se trata de una cuenta de parodia, cuyo incumplimiento conllevará una suspensión permanente de la plataforma.
Elon también dijo que cualquier cambio de nombre también provocaría la pérdida temporal de la marca de verificación.
Twitter ya tenía una política bastante estricta sobre la suplantación de identidad, pero los impostores solían recibir una advertencia justa antes de la suspensión.
Musk ha experimentado de primera mano la suplantación de identidad, ya que muchos usuarios verificados de Twitter se han rebautizado como Elon Musk e incluso han cambiado sus fotos de perfil para que coincidan con la foto de perfil actual de Musk.