Hoy más de 1.000 millones de personas intercambian mensajes, llamadas de teléfono, fotografías y vídeos a través de Whatsapp.
Aunque la compañía cifra los mensajes de texto desde hace tiempo, a mitad de marzo escuchamos que las llamadas de voz comenzarían a ser cifradas en cuestión de semanas.
A partir de hoy, WhatsApp cifra todas las comunicaciones enviadas a través de su plataforma, independientemente de qué dispositivo utilices – Android, iPhone, Windows Phone o Nokia – o qué tipo de mensaje envíes – texto, voz, imagen o vídeo.
El servicio cifrará todas las comunicaciones extremo a extremo, lo que quiere decir que ni siquiera los empleados de WhatsApp podrán leer los datos enviados por su red. Por tanto, la compañía no tendrá forma de cumplir con una orden judicial para acceder al contenido de un mensaje, una llamada, una fotografía o un vídeo que viaje por su red.
Este movimiento será muy bien recibido por la comunidad de usuarios, que anda bastante preocupada por la privacidad de las comunicaciones, especialmente tras las presiones del gobierno estadounidense para que Apple diera acceso a un teléfono cifrado.
A finales de 2014, WhatsApp cifró parte de su red y, desde entonces, su servicio ha sido presuntamente utilizado para facilitar actos criminales, incluyendo los ataques terroristas a París el año pasado. Según The New York Times, el Departamento de Justicia de EE UU planea demandar a la compañía por no haber cumplido con una orden para pinchar una comunicación. | Fuente: Wired