En la serie de televisión de 1982, El coche fantástico, el protagonista podía mantener una conversación completa con su coche, KITT.
Este tipo de interfaz lingüística podría estar pronto cerca de la realidad, porque General Motors está trabajando para llevar a sus automóviles un asistente de IA al estilo de ChatGPT.
Microsoft ha invertido mucho en OpenAI, la empresa que creó ChatGPT. Ahora, están buscando formas de aplicar la tecnología chatbot a muchos campos diferentes.
«ChatGPT va a estar en todo», cita Reuters a Scott Miller, vicepresidente de GM, en una entrevista la semana pasada. Miller puso como ejemplos la posibilidad de explorar las funciones de un vehículo que se encuentran en el manual, integrar horarios en un calendario o programar el código de la puerta de un garaje mediante una interfaz de voz conversacional.
El coche fantástico
Un conductor podría preguntar a un futuro coche con IA cómo arreglar una rueda pinchada, y el coche reproduciría un vídeo instructivo o daría instrucciones paso a paso sobre cómo cambiarla.
Los grandes modelos de lenguaje (LLM) como ChatGPT procesan texto para ofrecer respuestas que se basan en gran medida en el contexto de la conversación y en un amplio conjunto de datos entrenados con información de Internet.
Sin embargo, también se sabe que generan errores convincentes cuando ofrecen información objetiva. Este es un problema evidente que GM y Microsoft tendrán que resolver antes de sacar al mercado una solución.