La startup china Rokid ha encontrado un nuevo nicho de mercado para su tecnología de realidad aumentada en medio de la pandemia de coronavirus: gafas inteligentes que detectan la temperatura de los que te rodean.
La compañía con sede en Hangzhou ya ha vendido aproximadamente 1.000 pares a gobiernos, empresas y escuelas, según un informe de Reuters.
Si bien sus productos suelen estar adaptados a los mercados de la fabricación y los videojuegos, Rokid se ha dedicado recientemente a crear una mejor forma de detectar los síntomas del COVID-19. En un par de semanas, la compañía desarrolló sus nuevas gafas T1, un dispositivo que puede «ver» las temperaturas de las personas hasta a 3 metros de distancia.
Las gafas vienen equipadas con un sensor de infrarrojos que mide las temperaturas cercanas con la ayuda de una cámara, y comunica esa información en tiempo real a la pantalla. Las gafas llevan una CPU de Qualcomm y una cámara de 12 megapíxeles, y puede guardar fotos y vídeo en manos libres.
Dada la gran cantidad de puntos de control de temperatura que se han instaurado en parques industriales y espacios públicos en toda China en medio del brote, el vicepresidente de Rokid, Xiang Wenjie, ha explicado que la demanda de sus gafas T1 ha aumentado rápidamente.