Apple patenta un volante y unos pedales retráctiles para un coche autónomo

Apple ha obtenido una patente para un volante y pedales retráctiles en un coche, cuando se utiliza en modo de conducción autónoma.

La patente describe un coche capaz de conducirse a sí mismo en algunas situaciones, pero no en otras, lo que parece abordar las limitaciones actuales de la tecnología y la legislación vigente.

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En concreto, Apple sugiere que un coche puede ser capaz de conducirse a sí mismo de forma totalmente autónoma en un entorno relativamente sencillo, como una autopista de varios carriles, pero seguir necesitando una conducción manual en las calles de la ciudad.

Los vehículos de pasajeros tradicionales incluyen dispositivos de entrada del conductor para recibir entradas del conductor para controlar el movimiento del vehículo. Los dispositivos típicos de entrada del conductor incluyen un volante, un pedal de aceleración y un pedal de freno para recibir las entradas de control del conductor que incluyen la dirección, el acelerador y el freno, respectivamente.

Con el desarrollo en curso de los sistemas de conducción autónoma, la intervención del conductor puede no ser necesaria para controlar el movimiento del vehículo al menos en algunas circunstancias, mientras que la intervención del conductor puede seguir siendo necesaria o deseada en otras circunstancias.

Por ejemplo, puede no ser necesaria la intervención del conductor al conducir por una autopista con sistemas de control de crucero adaptativo, en los que el acelerador y el freno se accionan automáticamente para acelerar y frenar el vehículo en función de la detección de otros vehículos basada en radares, y con sistemas de centrado en el carril, en los que la dirección se acciona automáticamente para mantener el vehículo en un carril.

Dependiendo de los sistemas de conducción autónoma disponibles en un vehículo determinado, la intervención del conductor puede seguir siendo necesaria en otras circunstancias, como en entornos congestionados o menos controlados (por ejemplo, en zonas urbanas), o puede ser deseada de otro modo, como cuando el conductor simplemente prefiere controlar manualmente el movimiento del vehículo.

Al hacer que los pedales se retraigan en el suelo cuando no sean necesarios y que el volante se retraiga en el salpicadero, se crea una mayor flexibilidad para que los asientos pivoten y se reclinen. También aumenta la seguridad al garantizar que un pasajero no pueda interferir accidentalmente en la conducción del coche.

Como siempre, debemos tener en cuenta que Apple patenta muchas más cosas de las que llega a fabricar. Más aún en el caso de las patentes de automoción, ya que aún no está claro si llegará a existir un Apple Car, o si simplemente veremos asociaciones con marcas de automóviles existentes para incorporar la tecnología de Apple a sus vehículos.

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Sobre el Autor
Luis A.
Luis es el creador y editor jefe de Teknófilo. Se aficionó a la tecnología con un Commodore 64 e hizo sus pinitos programando gracias a los míticos libros de 🛒 'BASIC para niños' con 11 años. Con el paso de los años, la afición a los ordenadores se ha extendido a cualquier cacharrito que tenga una pantalla y CPU.
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