La campaña de crowdfunding del Meizu Zero fracasa estrepitosamente con solo 29 patrocinadores

Hace poco más de un mes, Meizu lanzó una campaña de financiación tipo crowdfunding en Indiegogo para su smartphone sin puertos «Zero».

Zero es la respuesta de Meizu al smartphone APEX de Vivo para 2019. En ambos casos se trata de dispositivos con diseño minimalista sin ningún tipo de elemento en su superficie como la rejilla del altavoz, el conector de auriculares, los botones físicos, el auricular para el oído o el puerto USB. Por no tener, no cuenta ni con bandeja para la tarjeta SIM ya que utiliza eSIM.

Sin embargo, con un precio de 1.299 dólares (1.149€), no es de extrañar que el proyecto de crowdfunding de Indiegogo haya fracasado con sólo 29 patrocinadores.

A pesar de la existencia de unidades funcionales, no se sabe nada sobre el futuro de los Zero en este momento, pero en respuesta a un tema relacionado en el foro oficial de Meizu, el fundador y CEO Jack Wong hizo una declaración al respecto.

«Este proyecto de crowdfunding era sólo del equipo de marketing,» dijo Wong. «El teléfono sin orificios es sólo un proyecto de desarrollo del departamento de I+D, nunca tuvimos la intención de producir este proyecto en masa.”

La reacción de los aficionados a la declaración de Wong no ha sido muy positiva y refleja cómo algunas compañías abusan de las plataformas de crowdfunding con el único de fin de conseguir algo de publicidad.

La única ventaja que tenía el Zero sobre el APEX era que en lugar de usar pines en la parte posterior, contaba con carga inalámbrica junto con una especie de conectividad USB inalámbrica.

Aún así, no parece que la gente está dispuesta a pagar esa cantidad de dinero solo por un smartphones sin orificios. Como hemos visto otras veces, en ocasiones los fabricantes se empeñan en solucionar problemas que no existen.

¿Cuál es tu reacción?
Sorprendido
0%
Feliz
0%
Indiferente
0%
Triste
0%
Enfadado
0%
Aburrido
0%
Incrédulo
0%
¡Buen trabajo!
0%
Sobre el Autor
Luis A.
Luis es el creador y editor jefe de Teknófilo. Se aficionó a la tecnología con un Commodore 64 e hizo sus pinitos programando gracias a los míticos libros de 🛒 'BASIC para niños' con 11 años. Con el paso de los años, la afición a los ordenadores se ha extendido a cualquier cacharrito que tenga una pantalla y CPU.
Comentarios
Deja un comentario

Deja un comentario