Hoy Microsoft ha presentado una nueva versión de su sistema operativo, llamada Windows 10 S.
A diferencia de otras versiones de este sistema, Windows 10 S solamente puede ejecutar aplicaciones descargadas desde la Windows Store, haciendo que sea más rápido y más seguro que Windows 10 Pro. El nuevo sistema operativo es la alternativa de Microsoft a Chrome OS, y está dirigido principalmente al sector educativo.
Sin embargo, si Windows 10 S no te convence, tienes una alternativa. En cualquier máquina con Windows 10 S, podremos instalar Windows 10 Pro previo pago de 49 dólares. Una vez que actualices el sistema operativo, tu dispositivo funcionará como cualquier otro ordenador con Windows 10, capaz de ejecutar aplicaciones descargadas de Internet.
Al actualizar tu ordenador de Windows 10 S a Windows 10 Pro, Microsoft deja de garantizar la autonomía de tu ordenador, y tampoco asegura un funcionamiento tan fluido como con Windows 10 S. El cambio no es reversible, es decir, una vez que pases a Windows 10 Pro no podrás ir hacia atrás.
Además, si compras un portátil Surface Laptop (que utiliza Windows 10 S por defecto), podrás actualizar a Windows 10 Pro de forma gratuita solo durante el año 2017. Dado que el portátil cuesta 999 dólares, es bastante razonable que Microsoft haya eliminado este coste.