Allwinner, una fabricante de chips chino que desarrolla el procesador utilizado en muchos tablets Android de bajo coste, PCs con procesador ARM y otros dispositivos, distribuyó una versión de su kernel de Linux con una puerta trasera.
Todo lo que tiene que hacer una aplicación para obtener acceso root es enviar el texto «rootmydevice» a un proceso de debugging sin documentar.
Esta puerta trasera ha podido quedarse en el kernel de manera no intencionada, tras el proceso de depuración que llevasen a cabo los desarrolladores. Sin embargo, la forma en la que la compañía lo ha manejado hace sospechar.
La información sobre la puerta trasera fue liberada y después fue [...]