Apple pensó que el medidor de batería de macOS se había roto cuando probó el chip M1

El vicepresidente de marketing de Apple ha explicado que pensaron que había un fallo en macOS cuando realizaron las primeras pruebas de batería del chip M1 de Apple.

El ejecutivo de Apple dice que el personal no daba crédito a los primeros resultados de duración de la batería del procesador M1.

«Cuando vimos ese primer sistema y te sentabas a jugar con él durante unas horas y la batería no se movía, pensamos: ‘Oh, tío, eso es un fallo, el indicador de la batería está roto’«, explica Bob Borchers, vicepresidente de marketing mundial de productos de Apple.

«Y entonces Tim [Milet] se rió en el fondo, ‘No, así es como se supone que debe ser'», continuó en referencia a Tim Milet, vicepresidente de arquitectura de plataformas de Apple.

Antes de embarcarse en sus planes de Apple Silicon, Milet afirma que preparar el software de emulación Rosetta 2 tenía que ser lo primero.

«Empezamos un pequeño proyecto años antes de iniciar la transición a Apple Silicon para tratar de asegurarnos de que podíamos ofrecer la segunda generación de Rosetta de una manera que nos permitiera hacerlo sin problemas», continuó. «Y creemos que eso fue una gran parte de la historia de la transición, todo funcionó como se esperaba».

Ni Milet ni Borchers quisieron hablar de los detalles del futuro de Apple Silicon. Sin embargo, Milet reconoció que los jugadores, por ejemplo, quieren aún más potencia.

«Por supuesto, se puede imaginar el orgullo de algunos de los responsables de las GPU y la idea de: ‘Oye, ¿no sería estupendo que llegara a un conjunto más amplio de esos jugadores realmente intensos?«, dijo. «Es un lugar natural para que busquemos, para que trabajemos estrechamente con nuestro equipo de Metal y nuestro equipo de desarrolladores. Nos encanta el reto».

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Sobre el Autor
Luis A.
Luis es el creador y editor jefe de Teknófilo. Se aficionó a la tecnología con un Commodore 64 e hizo sus pinitos programando gracias a los míticos libros de 🛒 'BASIC para niños' con 11 años. Con el paso de los años, la afición a los ordenadores se ha extendido a cualquier cacharrito que tenga una pantalla y CPU.
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