Las webs conspiratorias sobre COVID-19 no podrán poner anuncios de Google

Google ha anunciado el veto publicitario a los sitios web que promueven teorías de conspiración de coronavirus.

A partir del 18 de agosto, Google ya no permitirá a los editores que promueven teoría conspiratorias sobre el coronavirus monetizar sus sitios con anuncios de Google.

El cambio de política permitirá al gigante de la búsqueda prohibir los anuncios en ciertas páginas o bloquear un sitio web entero de su plataforma de publicidad.

Google ya prohíbe a los sitios web de la red de anuncios publicar información médica errónea que pueda dañar a otros. Esta nueva política amplía esto para incluir conspiraciones más amplias como COVID-19 y aquellas que difunden información errónea sobre posibles vacunas.

Junto con muchas otras compañías tecnológicas, Google ha luchado por mantener el equilibrio respecto al contenido sobre la pandemia mundial.

A principios de 2020, el motor de búsqueda prohibió a los anunciantes no gubernamentales publicar anuncios en su red relativos al COVID-19. YouTube, propiedad de Google, también dificultó a los creadores la monetización de videos relacionados con el coronavirus.

A medida que el coronavirus pasó a ser una pandemia, YouTube revisó sus políticas para permitir a más creadores monetizar el contenido de COVID-19. Google también cambió las políticas que limitaban quién puede publicar anuncios de búsqueda relacionados con el coronavirus.

Google y otras compañías de tecnología están dejando claro que todavía no apoyarán teorías de conspiración perjudiciales y la desinformación sobre la pandemia.

Google ya ha eliminado más de 200 millones de anuncios relacionados con el coronavirus que iban en contra de sus políticas. La compañía ganó 135.000 millones de dólares con su programa de publicidad el año pasado.

¿Cuál es tu reacción?
Sorprendido
20%
Feliz
40%
Indiferente
20%
Triste
0%
Enfadado
20%
Aburrido
0%
Incrédulo
0%
¡Buen trabajo!
0%
Sobre el Autor
Luis A.
Luis es el creador y editor jefe de Teknófilo. Se aficionó a la tecnología con un Commodore 64 e hizo sus pinitos programando gracias a los míticos libros de 🛒 'BASIC para niños' con 11 años. Con el paso de los años, la afición a los ordenadores se ha extendido a cualquier cacharrito que tenga una pantalla y CPU.
Comentarios
Deja un comentario

Deja un comentario