La Justicia confirma que LaLiga no podrá denunciar a los usuarios que ven fútbol pirata
LaLiga ha tomado medidas legales contra la piratería, al solicitar la persecución de una forma específica de piratería conocida como «cardsharing», una práctica que ha generado preocupación en la industria.
LaLiga presentó una solicitud al juzgado de lo Mercantil nº 8 de Barcelona para llevar a cabo diligencias preliminares dirigidas a combatir el cardsharing.
En esencia, la petición busca obtener datos de identificación de personas asociadas a direcciones IP específicas que han estado involucradas en esta práctica ilícita.
El cardsharing implica que usuarios legítimos redistribuyen la señal a redes «piratas», donde todos los participantes, incluidos aquellos que solo incurren en fraude de cuotas, utilizan decodificadores. La práctica, según se describe, implica la distribución directa o indirecta de contenidos protegidos por derechos audiovisuales.
Específicamente, LaLiga busca identificar a los «cardsharers», aquellos que redistribuyen la señal con fines lucrativos, excluyendo a los usuarios finales que simplemente incumplen la cuota.
La resolución del magistrado del juzgado mercantil 8 de Barcelona requiere a las empresas de telecomunicaciones que proporcionen datos personales únicamente de los «cardsharers» que comparten ilegalmente los contenidos, obteniendo un beneficio económico.
Es importante destacar que esta acción legal no tiene como objetivo los casos en los que los usuarios solo incurren en el incumplimiento de la cuota.
Las posibles demandas que surjan de estas diligencias preliminares estarán dirigidas específicamente contra los «cardsharers» que obtienen un beneficio económico al redistribuir la señal de manera ilícita. LaLiga busca así salvaguardar la integridad de sus contenidos y proteger los derechos de propiedad intelectual asociados.
