El gobierno de Australia planea introducir una ley que, en ciertos casos, obligaría a las empresas de redes sociales a entregar la información personal de usuarios que publiquen comentarios difamatorios.
Si alguien sospecha que está siendo difamado, acosado o atacado en las plataformas online, un nuevo mecanismo de denuncia exigiría a estas plataformas que retiraran las publicaciones ofensivas.
Si un sitio se niega a retirar el material, el sistema judicial podría ordenarle que entregue los datos del usuario que está detrás de las publicaciones.
«El mundo en línea no debería ser un salvaje oeste en el que los bots, los fanboys y los trolls, entre otros, puedan ir [...]