Mercedes-Benz comienza a cobrar una suscripción anual por desbloquear toda la potencia del motor
Mercedes es el último fabricante que ha incluido el desbloqueo de ciertas características de su vehículo tras una cuota de suscripción.
El fabricante de automóviles ha anunciado un complemento de «Aumento de la aceleración» que permite acceder a prestaciones del motor que su vehículo ya es capaz de ofrecer, pero que no están activas si no se paga por ellas.
La suscripción anual de 1.200 dólares aumenta la potencia de los motores entre un 20 y un 24%, incrementando el par motor y reduciendo entre 0,8 y 0,9 segundos la aceleración de 0 a 100 km/h en el modo de conducción Dinámico.
La suscripción no incluye ninguna mejora física del equipamiento, sino que simplemente desbloquea capacidades del vehículo, lo que indica que Mercedes ha limitado intencionadamente las prestaciones para venderlas después como un extra opcional.
Esta funcionalidad sólo está disponible para los modelos de coche eléctrico Mercedes-EQ EQE y Mercedes-EQ EQS:
- Mercedes-EQ EQE 350 4MATIC (de 288 a 349 CV, 0-100 km/h de 6.0 a 5.1 segundos)
- Mercedes-EQ EQE SUV 350 4MATIC (de 288 a 349 CV, 0-100 km/h de 6.2 a 5.2 segundos)
- Mercedes-EQ EQS 450 4MATIC (de 355 a 443 CV, 0-100 km/h de 5.3 a 4.5 segundos)
- Mercedes-EQ EQS SUV 4MATIC (de 355 a 443 CV, 0-100 km/h de 5.8 a 4.9 segundos)
A medida que las ventas mundiales de coches nuevos han ido cayendo en los últimos años, los fabricantes de automóviles han pasado a vender las actualizaciones de software y las funciones como suscripciones para generar un flujo de ingresos continuo tras la compra de un coche.
Aunque esto tiene sentido para ciertas características de software que pueden tener un coste recurrente para el fabricante (como funciones de navegación premium o la supervisión del vehículo a través de Internet), el hecho de que Mercedes haya puesto un muro de pago a las prestaciones ya incluidas en el vehículo no será bien recibido por los usuarios.
Esto se produce apenas unos meses después de que BMW provocara la indignación al cobrar una suscripción mensual de 18 dólares en algunos países para que los propietarios pudieran utilizar los asientos calefactados ya instalados en sus vehículos.
