Prepárate para una nueva subida de precios de Netflix
Netflix, uno de los gigantes del streaming, ha confirmado lo que se venía rumoreando: un aumento en sus tarifas por segunda vez en dos años. Esta noticia ha dejado a los suscriptores cuestionando si vale la pena mantener su suscripción.
En defensa de Netflix, es importante destacar que no todos los planes se ven afectados, sino solo dos de los cuatro. Los cambios se reflejan en el paquete Básico, que en Estados Unidos pasa de $9.99 al mes a $11.99, y en el Premium, que sube de $19.99 a $22.99, lo que representa un aumento del 20% y 15%, respectivamente.
Por otro lado, las tarifas del Standard con anuncios ($6.99) y del Standard ($15.49) se mantienen sin cambios, al menos por el momento.
Los usuarios de Reino Unido y Francia también se ven afectados por esta subida de precios, con las tarifas de los paquetes Básico y Premium aumentando a £7.99/€10.99 y £17.99/€19.99, respectivamente. Por el momento, no hay cambios en las tarifas en España, pero no podemos descartar que ocurran en algún momento cercano.
La subida de precio que más impacta es la del plan Premium, ya que no solo ha aumentado considerablemente en los últimos meses, sino que también es la única opción que permite la transmisión de contenidos en 4K.
La explicación detrás de estos aumentos de precios se encuentra en una carta a los accionistas, en la que la compañía declara que, mientras que pausó los aumentos de precio mientras implementaban las medidas contra la compartición de cuentas, su enfoque general sigue siendo el mismo: «una variedad de precios y planes para satisfacer una amplia gama de necesidades, y a medida que entregamos más valor a nuestros miembros, ocasionalmente les pedimos que paguen un poco más».
La idea subyacente es que los precios más altos de las suscripciones financian la creación de contenido de mayor calidad, lo que a su vez atrae a más suscriptores.
Netflix argumenta que su precio para el nivel con anuncios sigue siendo «extremadamente competitivo en comparación con otros servicios de streaming» y que es «mucho menos que el precio promedio de una entrada de cine»
